domingo, 14 de octubre de 2012

Observo el trasegar de las personas, buscando tinta para mis palabras, a ver si alguien es capaz de seducirme con sus pasos, buscando al protagonista de mi próximo relato. Entre tragos que amargan mi garganta pero llenan mi sangre de la locura necesaria.Seres que no quieren ser más que títeres en esta vida insana, llena de dedos que acusan al más cercano y nunca apuntan entre sus cejas, porque es más fácil mirar lo de fuera que escuchar el interior, para eso se necesita tiempo, paciencia y meditación. Pero el tiempo corre muy deprisa para quienes están absorbidos por la rutina, para los que siguen el guión que nos marca esta sociedad nefasta, vacía de valores.La crisis es la culpable dicen, y no puedo estar más de acuerdo pero la verdadera crisis es la de los valores,la educación, la solidaridad, el respeto...

1 comentario:

  1. llena de dedos que acusan al más cercano y nunca apuntan entre sus cejas, porque es más fácil mirar lo de fuera que escuchar el interior, para eso se necesita tiempo, paciencia y meditación.
    Me gusta esta parte, porque estoy totalmente de acuerdo con esa idea, porque cuando pasa algo es mas fácil culpar a los demás que empezar a mirarse a uno mismo primero.
    Preguntarse que ha podido pasar y que he hecho yo para que esto sucediera,...

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